Cuando iniciamos una jornada de sensibilización dentro de nuestras comunidades acerca de la trata de personas, los alertamos acerca de lo expuesto que están sobre todo nuestros niños, jóvenes y mujeres. Por tanto estaríamos llegando a ellos antes del problema, y en caso de que exista se puede dar valentía a la persona para hacer denuncias y no quedarse callados. Ser cero tolerantes.