1.Como nuestros niños respondan a sus emociones puede potencialmente protegerlos de ASM. De ahí la gran importancia de estar presentes en su crianza.
2. Si como adultos cercanos a niños observaremos con mas detenimiento y conocemos los factores de vulnerabilidad de ante el ASM podremos efectivamente detener el ASM y prevenirlo.
3. Reconocer el valor que Dios le da a cada pequeño y el cumulo de potencial que ha puesto en ellos, teniendo la paciencia para enseñarles a reconocerlo en si mismos crea en cada pequeño la conciencia del valor que Dios les ha dado. Por lo tanto se levanta en su mente una gran muralla para administrar y cuidar la “propiedad De Dios” que son ellos mismos.