1. Cuando hablamos con los niños para entender y expresar emociones, los ayudamos construir relaciones fuertes y saludables con sus compañeros, familiares y su entorno en general.
2.A crear y mantener entornos seguros en los diferentes ambientes donde el menor se encuentre protegido y en confianza para poder expresar sus inquietudes y todo lo que le pase.
3. Los niños que se sienten seguros de sí mismos y capaces de expresar sus emociones y establecer límites son menos propensos a ser víctimas de abuso. Por lo tanto, es importante fomentar la asertividad y la autoestima en los niños desde una edad temprana.